Es calmarse ante el Señor
¡Ya puedes, alma mía, estar tranquila,que el SEÑOR ha sido bueno contigo! (Salmos 116:7 NIV)
Veneración y reverencia
¡Qué felices son los que temen al Señor y se deleitan en obedecer Sus mandatos! (Salmo 112:1 NTV)
¿Con cuánto basta, entonces?
Busquen el reino de Dios por encima de todo lo demás, y él les dará todo lo que necesiten. (Lucas 12:31 NTV)
¡Así de sencillo es!
Todo mi ser te desea por las noches; por la mañana mi espíritu te busca. (Isaías 26:9 NVI)
Un contacto personal
Deléitate en el Señor y Él te concederá las peticiones de tu corazón. (Salmos 37:4)
No se avergüenza
Pero ellos anhelaban una patria superior; es decir, la celestial. Por eso Dios no se avergüenza de llamarse el Dios de ellos. (Hebreos 11:16 RVA2015)
Muy atareado?
Me darás a conocer la senda de la vida; en Tu presencia hay plenitud de gozo; en Tu diestra hay deleites para siempre. (Salmo 16:11 NBLH)
La verdadera riqueza
He aquí Yo vengo pronto, y Mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra. (Apocalipsis 22:12 RV1960)
Primero es Dios
El que me ama, Mi palabra guardará; y Mi Padre lo amará, y vendremos a él y haremos morada con él. (Juan 14:23 RVA)