Somos humanos, todos tenemos debilidades en algún aspecto
Y me ha dicho: “Bástate mi gracia, porque mi poder se perfecciona en la debilidad”. (2 Corintios 12:9 RVA-2015)
Él puede ser fuerte en nosotros
Pero Él me dijo: “Te basta con Mi gracia, pues Mi poder se perfecciona en la debilidad”. Por lo tanto, gustosamente haré más bien alarde de mis debilidades, para que permanezca sobre mí el poder de Cristo». (2 Corintios 12:9, NVI)
Jesús abrió el camino
En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros: en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo para que vivamos por él. (1 Juan 4:9 RVA2015)
¿Por qué los vamos a evocar nosotros?
Yo soy el que por amor a mí mismo borra tus transgresiones y no se acuerda más de tus pecados (Isaías 43:25 NVI)
Mostró el amor de Dios
En el principio la Palabra ya existía. La Palabra estaba con Dios, y la Palabra era Dios. El que es la Palabra existía en el principio con Dios. Dios creó todas las cosas por medio de él, y nada fue creado sin él. (Juan 1:1-3 NTV)
Una hermosa vasija
Señor, Tú eres nuestro Padre; nosotros barro, y Tú el que nos formaste; así que obra de Tus manos somos todos nosotros. (Isaías 64:8)
«Perfectos»
Pero Él me dijo: “Te basta con Mi gracia, pues Mi poder se perfecciona en la debilidad”. Por lo tanto, gustosamente haré más bien alarde de mis debilidades, para que permanezca sobre mí el poder de Cristo. (2 Corintios 12:9 NVI)
Un Padre amoroso
Señor, si mirares a los pecados, ¿quién, oh Señor, podrá mantenerse? (Salmo 130:3)
Amor, Gracia y Misericordia
Pues la ley nunca perfeccionó nada, pero ahora confiamos en una mejor esperanza por la cual nos acercamos a Dios. (Hebreos 7:19 NTV)
Es la gracia
Dios es tan rico en misericordia y nos amó tanto que, a pesar de que estábamos muertos por causa de nuestros pecados, nos dio vida cuando levantó a Cristo de los muertos. (¡Es solo por la gracia de Dios que ustedes han sido salvados!) (Efesios 2:4-5 NTV)
Nuestra fortaleza
No que estemos capacitados para hacer algo por nosotros mismos; al contrario, nuestra capacidad proviene de Dios. (2 Corintios 3:5)
Jesús me ama
Den gracias al Dios de los cielos. Su gran amor perdura para siempre. (Salmo 136:26 NVI)
A través del velo
Así que, hermanos, tenemos libertad para entrar en el Lugar Santísimo por la sangre de Jesucristo, por el camino nuevo y vivo que Él nos abrió a través del velo, esto es, de Su carne. También tenemos un gran sacerdote sobre la casa de Dios. Acerquémonos, pues, con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia y lavados los cuerpos con agua pura. (Hebreos 10:19-22 RVR95)
La maravillosa realidad
En realidad, el Señor está en este lugar, y yo no me había dado cuenta. (Génesis 28:16 NVI)