Parte del plan divino
Para que la prueba de su fe —más preciosa que el oro que perece, aunque sea probado con fuego— sea hallada digna de alabanza, gloria y honra en la revelación de Jesucristo. (1 Pedro 1:7 RVA2015)
A veces Dios tiene que permitir que nos sucedan cosas con el fin de captar nuestra atención. Por ejemplo cuando estamos demasiado distraídos y nos ponemos a pensar en los afanes de esta vida, las dificultades y cosas así. Estamos tan preocupados por esto y aquello, que apartamos la mente del Señor y dejamos de confiar en Él.
¡El mío es un Dios todopoderoso que reina sobre todo lo que existe! No permitirá que el Enemigo, ninguno de sus diablillos ni el propio Satanás toquen un solo cabello de su cabeza a menos que de alguna forma se justifique o sea parte del plan divino.
¡El poder de Dios es ilimitado! En el plano espiritual Dios es todopoderoso. Hay un momento indicado para cada uno y para el plan de Dios para su vida. Él conoce el futuro y sabe lo que vamos a hacer.
¡Dios es el Ser Supremo, todopoderoso, omnisciente y omnipresente! Puede que a veces le cueste hacernos entender las cosas a algunos mortales por culpa de nuestras distracciones, terquedad y por muchos otros motivos. Pero hay una razón en todo lo que hace o permite que suceda en la vida de sus hijos. «Todas las cosas ayudan a bien a los que aman al Señor». —D. B. Berg [1]
Confía el pasado a la misericordia de Dios, el presente al amor de Dios y el futuro a la providencia de Dios». —San Agustín de Hipona
[1] Áncora Dios es Quien está al mando