Se me ocurrió
Él sacia al alma sedienta y llena de bien al alma hambrienta. (Salmo 107:9)
Me senté tranquilamente a escuchar las aves mientras tomaba una taza de té. Los rayos del sol me bañaban el rostro y me sentía en completa paz. Simplemente me empapé del momento y disfruté de sentir la presencia de Dios. Me hizo pensar en cuánto tiempo paso abstraída en el pasado y en el futuro y lo infrecuente que es poner toda mi atención en el momento presente.
En muchos casos divido mis energías en mis horas de esparcimiento jugando al solitario en el teléfono mientras veo una película o escucho un podcast, u oyendo la radio mientras manejo. Tengo muchos pequeños intereses que se comen mi tiempo y me distraen de las cosas lindas que me rodean. También echo de menos la tranquilidad que siento cuando permito que las cosas tengan su curso en mi vida y me las tomo como vienen.
Se me ocurrió que he pasado demasiado de mi tiempo de oración como si estuviera de compras: Tengo necesidades; las apunto en una lista. Me presento ante Dios y recito la lista. Lleno la canasta y vuelvo corriendo a casa. Hoy decidí esforzarme por pasar tiempo ininterrumpido todos los días para hallar gozo en Su presencia. —Joyce Suttin [1]
La vida no se compone de hitos, sino de momentos. Rose Kennedy (1890–1995)
[1] Conéctate Disfrutar del momento