No temas, hagámoslo juntos
Pongan todas sus preocupaciones y ansiedades en las manos de Dios, porque él cuida de ustedes. (1 Pedro 5:7 NTV)
En nuestra sociedad se ha dado tanto lugar a la ansiedad que a veces esta palabra parece definir nuestra época. Es interesante, ya que la Biblia nos dice simple y repetidamente «no temas». Una solución de dos palabras para el miedo y la ansiedad. Pero, ¿cómo funciona eso?
A mí me ayuda tomarlo por partes y dar un primer paso. Por ejemplo, hace poco tuve que preparar una entrevista de trabajo. Estaba nerviosa y el miedo a fallar ocupaba de lleno mis pensamientos; así que abordé el asunto por partes. Recopilé las preguntas que creía que me iban a hacer y preparé las respuestas. Luego pedí a mis compañeros que me dieran su opinión sobre mis respuestas y apliqué sus ideas. Cada uno de esos pasos fue incómodo, pero pude realizarlos de uno en uno. Y cada vez me daba la satisfacción de que avanzaba un poco más en la dirección que quería tomar.
Tanto si quieres modificar tu mentalidad o una costumbre, como si quieres alcanzar un objetivo, la fórmula es la misma: Da el paso que esté a tu alcance; y confía en Dios para el siguiente. Cuando tengas miedo, confía en Dios, que te dice: «No temas, hagámoslo juntos». —Marie Alvero [1]
Nada te turbe,
Nada te espante,
Todo se pasa,
Dios no se muda.
La paciencia Todo lo alcanza;
Quien a Dios tiene
Nada le falta:
Sólo Dios basta. —Santa Teresa de Ávila
[1] Conéctate No temas