Encontrar consuelo

Te entregaré tesoros escondidos y te daré a conocer recónditos secretos, para que sepas que Yo soy el Señor, el Dios de Israel, que te llamo por tu nombre.  (Isaías 45:3 RVC)

 A mí siempre me ayuda saber que toda dolencia, prueba o desafío que soporto en última instancia servirá a un buen propósito.

 Me consuela mucho recordarme a mí misma que el Señor tiene un plan, a pesar de los reveses o pérdidas que enfrentemos en la vida, y que si no dejo de confiar en Él, podrá culminar ese plan conforme a Su voluntad.

 Uno de los beneficios principales de esos momentos de prueba es que a menudo en esos casos acudimos a Él y encontramos los tesoros ocultos que brinda la dulce comunión con Él en Su rincón secreto.

 Quiere que clamen a Él en esos momentos y que dejen que Él mismo les dé Sus Palabras de orientación, aliento, Palabras que infunden tranquilidad. Figúrense que el Señor quiere pastorearlos personalmente.

Cuando se sientan solos, cuando necesiten un paño de lágrimas, alguien que los comprenda, una palabra de compasión y aliento, ¡Jesús siempre está con ustedes! —M. Fontaine [1]

 Pero, ¿miramos la vida con la certeza de que lo mejor está por llegar? ¿Que el agua puede transformarse en un vino mejor? Porque cuando crece la amistad con Él, la vida sólo puede crecer en belleza y sabor. —Cesare Beltrami

[1] M. Fontaine Áncora Jesús, nuestro buen Pastor