Es un privilegio invitarlo a ser mi piloto

Pero que la paciencia tenga su obra completa para que sean completos y cabales, no quedando atrás en nada. (Santiago 1:4 RVA-2015)

 La Biblia habla de la virtud de la paciencia y de sus recompensas. La tolerancia, la
persistencia, el autodominio y la capacidad de ser amables con quienes quizá no lo
han sido mucho con nosotros son cualidades relacionadas con la paciencia.
 Hebreos 12:1,2 dice: «Despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y  corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe». Ciertas traducciones más recientes emplean la palabra perseverancia o resistencia en vez de paciencia. La metáfora de la carrera alude a nuestra vida como cristianos. Dejamos de ser meros espectadores sentados en las gradas y nos lanzamos a una carrera de por vida, aspirando a vivir cerca de Dios. Jesús se convierte en nuestro entrenador y modelo.
 En efecto, ¿quién soy yo para considerarme con derecho a impacientarme y resentirme por los retrasos que Él permite, después de todo lo que Él ha hecho por mí? Sé que es un privilegio invitarlo a ser mi piloto en toda circunstancia. ¿Qué mejor que estar dispuesto a abandonar mis proyectos para asociarme a Él en los Suyos? —William B. McGrath —William B. McGrath [1]

... Danos corazón para amar como Tú,
para llorar como Tú, Señor,
mucho más por los pecados ajenos
que por todas las ofensas que sufrimos.

Que todo ojo vea en nosotros,
Tus hermanos, contigo fundidos,
esa dulzura y gracia que nacen
de la unión, Señor, contigo. —Edward Denny “Paciencia de Jesús”

[1] Áncora La virtud de la paciencia

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