La fe viene por el oír

Si me piden alguna cosa en mi nombre, yo la haré. (Juan 14:14 RVA-2015)

 Para llevar una buena vida de oración, una de las principales cosas que hay que conocer es la Palabra de Dios. La fe crece mediante el estudio fiel de Su Palabra. «La fe viene por el oír la Palabra de Dios».
 Aunque Dios de todos modos puede responder, descubrirás que leer primero la Palabra de Dios te inspirará y te dará más fe para tus oraciones.
 Dios ha hecho promesas en Su Palabra; cuando ores, preséntaselas para que se las recuerdes. Cuando le recuerdas a Dios Su Palabra, demuestras tener fe en ella.
 Esta declaración categórica de tu fe y de tu conocimiento de Su Palabra es lo que agrada a Dios. Pues «sin fe es imposible agradar a Dios» —DBB [1]

 No hace falta decir que la oración forma parte de la vida y representa el punto más alto de la existencia. La oración es como el mar para los peces: la oración es mi mar. La oración como valor que funda mi propia humanidad; la oración como la perla entre todas las palabras. No, nadie puede vivir sin rezar, ni siquiera el ateo, porque todos se necesitan. [...] Es cierto, la oración es el momento decisivo de la existencia. —David María Turoldo

[1] DBB Áncora Clamar a Dios de todo corazón

Previous
Previous

La Ley del Amor

Next
Next

Un Padre amoroso