La esencia de la Navidad
Sean afectuosos unos con otros con amor fraternal; con honra, dándose preferencia unos a otros. (Romanos 12:10 NBLA)
La Navidad se disfruta más cuando no gira en torno a las decoraciones, los regalos o las festividades, sino en Mi regalo de amor al mundo. La esencia de la Navidad es el amor. La mejor forma de festejarla es pasar momentos verdaderamente provechosos con la familia y los amigos, y apreciar y celebrar el amor que los une.
Lamentablemente el amor puede quedar relegado en medio de los adornos, regalos, compras interminables y la cena y festividades navideñas.
La Natividad es Mi cumpleaños, el día en que entré en la historia de la humanidad con el mejor regalo que se haya entregado jamás. ¿Puedes dedicarme algo de tiempo en mi cumpleaños? ¿Puedes tomarte un minuto para entregarme tu corazón, y así pueda Yo expresarte lo mucho que te amo? Fue el amor que sentía por ti lo que me trajo a tu mundo y me movió a vivir y morir por ti.
El amor fue y sigue siendo la esencia de Mi naturaleza.
En Mi cumpleaños me gustaría que te tomaras tiempo para amar. Disfruta del alegre decorado, de las comidas deliciosas y el intercambio de regalos, pero no dejes que todo eso te distraiga y opaque lo mejor y más importante, lo único que perdurará por la eternidad, la esencia de la Navidad: el amor eterno. —Jesús [1]
La Navidad es el amor en acción. Cada vez que amamos, cada vez que somos generosos, estamos viviendo la Navidad. —Dale Evans (1912-2001)
[1] Jesús Conéctate Año 20, número 12