Los reyes de las naciones oprimen a sus súbditos, y los que ejercen autoridad sobre ellos se llaman a sí mismos benefactores. No sea así entre ustedes. Al contrario, el mayor debe comportarse como el menor, y el que manda como el que sirve. (Lucas 22:25,26 NVI)

Si ustedes aman solamente a quienes los aman a ustedes, ¿qué hacen de extraordinario? Hasta los pecadores se portan así… (Lucas 6:32-36)

Cualquiera que anhele ser grande entre ustedes será su servidor. (Mateo 20:26)

Sean siempre humildes y amables. Sean pacientes unos con otros y tolérense las faltas por amor. (Efesios 4:2 NTV)

En la fe murieron todos estos sin haber recibido lo prometido, sino mirándolo de lejos, creyéndolo y saludándolo, y confesando que eran extranjeros y peregrinos sobre la tierra. Pero anhelaban una [patria] mejor, esto es, celestial; por lo cual Dios no se avergüenza de llamarse Dios de ellos, porque les ha preparado una ciudad. (Hebreos 11:13,16)

Porque ejemplo les he dado para que, así como yo se los hice, ustedes también lo hagan. (Juan 13:15 RVA-2015)

Bueno es el Señor; es refugio en el día de la angustia y conoce a los que en él confían. (Nahúm 1:7 NVI)

Un corazón alegre es la mejor medicina. (Proverbios 17:22 RVC)

Sean agradecidos en toda circunstancia, pues esta es la voluntad de Dios para ustedes, los que pertenecen a Cristo Jesús. (1 Tesalonicenses 5:18 NTV)

La paz les dejo, Mi paz les doy. No como el mundo la da Yo se la doy a ustedes. No se turbe su corazón ni tenga miedo.  (Juan 14:27)

Cuando en mí la angustia iba en aumento, tu consuelo llenaba mi alma de alegría. (Salmos 94:19 NVI)

Alcen sus manos hacia el santuario y bendigan al SEÑOR. (Salmos 134:2 RVA-2015)

Bendeciré al Señor en todo tiempo; lo alabarán siempre mis labios. Mi alma se gloría en el Señor; lo oirán los humildes y se alegrarán. Engrandezcan al Señor conmigo; exaltemos a una su nombre. Busqué al Señor y él me respondió; me libró de todos mis temores. (Salmos 34:1-4 NVI)

No se angustien. Confíen en Dios y confíen también en mí. (Juan 14:1 RVA-2015)

Grande ganancia es la piedad con contentamiento. (1 Timoteo 6:6)

Así que somos embajadores de Cristo, como si Dios los exhortara a ustedes por medio de nosotros. (2 Corintios 5:20 RVA-2015)

Por tanto, no nos desanimamos. Al contrario, aunque por fuera nos vamos desgastando, por dentro nos vamos renovando día tras día. (2 Corintios 4:16 NVI)

Ten piedad de mí, Señor, porque desfallezco; sáname, Señor (Salmos 6:2a NVI)

¡Pero gracias sean dadas a Dios, de que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo! (1 Corintios 15:57)

Y cuando hayan padecido por un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, quien los ha llamado a su eterna gloria en Cristo Jesús, él mismo los restaurará, los afirmará, los fortalecerá y los establecerá. (1 Pedro 5:10 RVA-2015)